Con motivo del Día Mundial de Acción por el Alto el Fuego en Gaza, el lunes 18 de diciembre, las ONG internacionales unieron una vez más sus voces para exigir el fin de la ofensiva israelí sobre Gaza, que se desarrolla a sangre y fuego desde hace varias semanas. Mientras más de 19.400 personas, en su mayoría civiles, fueron asesinadas en el enclave palestino, varias peticiones en línea lideradas por el colectivo Ceasefire Now (Cese del Fuego) y apoyadas por 800 organizaciones reunieron más de 3 millones de firmas para pedir a todos jefes de Estado, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y los actores sobre el terreno “dar prioridad a la preservación de la vida humana”.
“El Consejo de Seguridad de la ONU, el Secretario General de la ONU y todos los líderes mundiales influyentes deben tomar medidas inmediatas para garantizar que un alto el fuego entre en vigor. Esta sigue siendo nuestra única opción para evitar más pérdidas de vidas civiles y una catástrofe humanitaria. Cualquier otro resultado será para siempre una mancha en nuestra conciencia colectiva”, se lee en la carta publicada en Change. Y añade: “Los civiles no son moneda de cambio. Las familias deben tener la oportunidad de enterrar y llorar a sus muertos. Debe terminar el ciclo de violencia contra civiles inocentes.”
La frustración de las agencias de la ONU y de las ONG al ver que la situación humanitaria se hunde en un profundo abismo crece cada día. Varias de ellas –Médicos del Mundo, Médicos Sin Fronteras, CCFD Tierra Solidaria, FIDH, Première Urgence Internationale, Acción contra el Hambre, Handicap International, Oxfam y Amnistía Internacional– se reunieron el lunes 18 de diciembre en París en Plaza de los Derechos Humanos para expresar su enojo por la inacción de la comunidad internacional a través de una manifestación durante la cual los manifestantes simularon muertes.
Francia expresa “divergencia” con Israel
Esta acción se produjo al día siguiente de una manifestación parisina que reunió, como cada semana desde octubre, a varios miles de personas –20.000 según los organizadores, incluido el líder de la Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon– para exigir un alto el fuego inmediato en Gaza, pero también el fin del asedio que asfixia esta franja de tierra palestina, así como el fin de la ocupación y la colonización en Cisjordania.
En su visita a Israel el domingo 17 de diciembre, la ministra francesa de Asuntos Exteriores, Catherine Colonna, pidió “una nueva tregua humanitaria inmediata y duradera, que debe conducir a un alto el fuego duradero”. “Tenemos una diferencia de punto de vista con Israel en cuanto a la forma que ejerce su “derecho a defenderse””, declaró la jefa de la diplomacia a France Info.
El Consejo de Seguridad estaba llamado a decidir, el martes 19 de diciembre, sobre una resolución que pide “un cese urgente y duradero de las hostilidades” en Gaza, pero el veto estadounidense corre el riesgo de descarrilar una vez más el proyecto para gran consternación de los partidarios del cese el fuego, muchos en EEUU, que han mostrado públicamente su ira contra Joe Biden.
