El martes 2 de mayo, el ministro flamenco de Asuntos Interiores abrió un procedimiento para la suspensión de tres mezquitas belgas vinculadas a Diyanet, la administración turca para Asuntos Religiosos. Razón invocada, informa la prensa belga, la injerencia extranjera notada.
En realidad, las infracciones del decreto flamenco sobre el reconocimiento de los lugares de culto locales se atribuyen a 12 mezquitas vinculadas a la Diyanet por el Servicio de Información y Control flamenco.
Representantes de este servicio presentaron un informe al Parlamento flamenco, durante una sesión a puerta cerrada, acompañados por funcionarios de la Seguridad del Estado y el Órgano de Coordinación para el Análisis de Amenazas (OCAM), un servicio federal que evalúa la amenaza terrorista y extremista en Bélgica.
Las mezquitas en cuestión deberán reorganizarse antes del 15 de noviembre. Tres de ellas, ubicadas en Lommel, Aalst y Heusden-Zolder, están suspendidas. El ministro del Interior, Bart Somers, tomará una decisión final dentro de un mes. Sus representantes deben ser oídos por las autoridades. Las otras nueve mezquitas han recibido una advertencia.
La pérdida o suspensión del reconocimiento público conlleva la pérdida de las subvenciones pagadas por el gobierno belga a todos los lugares de culto del país que las soliciten. Además, se denegaría el permiso de residencia a todo imam o ministro religioso de otro país que desee oficiar allí.
Flandes tiene 24 mezquitas reconocidas, 12 de las cuales pertenecen a la Diyanet. Actualmente se reconocen 77 comunidades religiosas locales islámicas, ortodoxas y protestantes y 21 pertenecen a la Diyanet. Doce solicitudes de reconocimiento fueron rechazadas en 2023, cuatro de las cuales procedían de mezquitas bajo Diyanet.
