
En el corazón de la Ciudad de la Educación de Doha, acaba de crearse un lugar único: Al-Mujadilah, la primera mezquita contemporánea diseñada especialmente para mujeres. Este ambicioso proyecto, dirigido por Su Alteza Sheija Moza bint Nasser y realizado por la agencia neoyorquina Diller Scofidio + Renfro, marca una auténtica revolución en el mundo de la arquitectura religiosa.
Además de un lugar de oración, Al-Mujadilah pretende ser un espacio de conocimiento, intercambio y comunidad. La gente viene aquí a orar, pero también a debatir, aprender y construir relaciones. Allí se organizan cursos, conferencias e incluso una cumbre anual en torno al papel de la mujer musulmana en la sociedad. Diseñar una mezquita para mujeres fue un verdadero reto. “Tuvimos que crear un espacio multifuncional, abierto y dinámico”, explica Elizabeth Diller, cofundadora de DS+R.
La arquitectura del lugar es a la vez poética y funcional. Un gran techo ondulado, perforado por miles de aberturas cónicas, deja entrar una luz suave y cambiante a lo largo del día. Dos olivos cruzan literalmente el tejado, símbolo de paz y anclaje en la vida. En su interior, la sala de oración de 875 m², orientada a La Meca, puede acoger hasta 750 personas. Una enorme alfombra, inspirada en un modelo tradicional turco, ha sido reelaborada en una versión contemporánea con tonos suaves y difuminados. Durante el Ramadán, los espacios flexibles permiten aumentar la capacidad hasta 1.300 fieles.
Otro fuerte gesto arquitectónico: el minarete, ha sido reinterpretado de forma innovadora. Una torre de 39 metros, delgada, sube y baja lentamente cinco veces al día.
Diseñada con un enfoque eco-responsable, la mezquita aspira a las certificaciones medioambientales más exigentes, con materiales sostenibles, gestión inteligente del agua y la luz y una cuidadosa integración paisajística.