En México, el islam ha echado raíces en las últimas décadas, con una comunidad islámica que ha crecido hasta alcanzar cerca de 10 mil integrantes. Estos musulmanes son, en su mayoría, migrantes provenientes de Oriente Medio, Asia, África, Europa, y América del Sur, además de mexicanos conversos.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), para 2020 había oficialmente 7.982 musulmanes en el país, con el 80 por ciento residiendo en la Ciudad de México y su zona conurbada; sin embargo, se estima que la cifra ha crecido en los últimos años.
La difusión del islam en México comenzó a consolidarse con la fundación del Centro Cultural Islámico de México en 1995, lo que permitió la creación de espacios de oración y centros culturales en diversas ciudades.
Actualmente, el país cuenta con múltiples mezquitas y musalahs (pequeños lugares de oración) distribuidos en entidades como Baja California, Chiapas, Coahuila, Jalisco, Puebla y la Ciudad de México.
Entre estos lugares, destaca el Centro Islámico Unido de Sonora (CIUS) de Hermosillo, que se encuentra en la colonia El Mariachi, en la calle Felícitas Zermeño número 34. Este espacio es más que un lugar de oración, es un punto de encuentro donde los musulmanes locales comparten su fe y fortalecen los lazos comunitarios.
La mezquita no solo sirve como refugio espiritual, sino también como un espacio para actividades culturales y de entendimiento mutuo, reflejando la diversidad y apertura de esta comunidad.
La presencia de este lugar en Hermosillo demuestra cómo el islam encuentra su lugar incluso en regiones alejadas de las principales concentraciones urbanas de México, promoviendo el respeto y el diálogo intercultural.