La percepción sobre los musulmanes entre los estadounidenses está cambiando gradualmente, dijo el ex sacerdote ortodoxo estadounidense Said Abdul Latif (Hilarion Heagy), quien abrazó el Islam recientemente.
El hombre de 41 años, sirvió como sacerdote durante 10 años y vivió como monje durante aún más tiempo. Decidió abrazar el Islam este año y cambió su nombre de Hilarion Heagy a Said Abdul Latif.
“Durante mucho tiempo después del 11 de septiembre, nos dijeron que los musulmanes y el Islam eran las mayores amenazas para nuestro estilo de vida estadounidense”, aseguró Abdul Latif a la Agencia Anadolu.
Agregó que, en respuesta a esto, algunos musulmanes estadounidenses buscaron asimilarse tanto como fuera posible a la cultura y la política de su país.
“Creo que el nivel de sentimiento antimusulmán ha disminuido significativamente en los últimos años a medida que se ha reducido la retórica de antimusulmana. Esto no significa que no exista, pero creo que la educación y la interacción general con la comunidad musulmana contribuyen en gran medida a fomentar una comprensión más profunda y mutua”, enfatizó.
Añadió que después de las guerras en Irak y Afganistán, el Islam ya no parece ser tomado como una amenaza como antes, y el sistema político estadounidense ha pasado a identificar nuevas amenazas contra su «democracia» y su forma de vida en la era pos-COVID-19.
Al hablar sobre su trayecto al Islam, Abdul Latif dijo que esta religión había sido de su interés durante muchos años.
“Mis primeras inclinaciones para convertirme al Islam llegaron cuando tenía poco más de 20 años, cuando era estudiante de la Universidad de Pittsburgh. Mientras crecía, tuve mucha exposición al Islam”, señaló.
Sin embargo, Abdul Latif dijo que tenía miedo de “dar el salto” porque le preocupaba lo que dirían sus padres y la sociedad.
Ingresó a un monasterio ortodoxo ruso en 2009 y fue ordenado sacerdote en 2013.
«Sin embargo, mi interés en el Islam continuó en diversos grados», agregó.
Abdul Latif subrayó que enfrentó reacciones severas después de convertirse al Islam.
“Es interesante, porque algunas de las personas que reaccionaron muy negativamente a mi conversión eran personas que yo hubiera pensado que responderían positivamente, y viceversa. Lo mismo puede decirse de mi familia. Para mi sorpresa, algunos de mis amigos cristianos me han apoyado, y para mi mayor sorpresa, algunos incluso han abrazado el Islam ya que se habían sentido atraídos por él en secreto durante mucho tiempo también”, enfatizó.
Señaló que no enfrentó directamente ninguna declaración islamófoba, pero recibió algunos “comentarios mordaces” sobre el Islam y el profeta Muhammad (PB).
