Los musulmanes en la región autónoma uigur de Xinjiang, en el noroeste de China, empezaron el martes la celebración del Ramadán bajo las medidas regulares contra la COVID-19.
Aproximadamente 300 musulmanes visitaron hoy la mezquita Ak en la capital regional Urumqi, informó el imam de la mezquita, Abduxukur Rahmutula, quien indicó que la mezquita es desinfectada tres veces al día.
Antes de entrar en la mezquita se toma la temperatura a los feligreses y se les aconseja mantener la distancia social, señaló la mezquita.
Después de cada oración se les proporciona frutas y té caliente a los creyentes, dijo Mamatimin Rexit, imán de una mezquita en la ciudad de Kashgar.
El Ramadán también se observó en otras regiones del país como Pekín, Gansu y Ningxia.
