Tolosa, Ordizia y Elgoibar se suman a San Sebastián y prevén tener habilitados antes de fin de año espacios dentro de sus cementerios para el enterramiento de ciudadanos musulmanes, respetando las costumbres y condiciones específicas que sigue esta comunidad. Así lo ha anunciado este martes el portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, después de que este periódico anunciara el pasado viernes que San Sebastián ultima la adecuación de un espacio dentro del camposanto de Polloe para este colectivo. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno de los martes, Zupiria ha explicado que la creación de espacios para el enterramiento de personas musulmanas responde a las necesidades detectadas «después de un proceso de un año de trabajo con la Comisión ADOS y las comunidades islámicas de Euskadi».
El portavoz ha admitido que hay otros ayuntamientos que ya han dado los primeros pasos para responder a esta demanda, pero que los que tienen el proceso más avanzado y pueden tener habilitadas las parcelas ya en 2022 son Donostia, Tolosa, Ordizia y Elgoibar.
Zupiria ha recordado que estos lugares deben cumplir una serie de requisitos para cumplir con el rito islámico, como que las sepulturas estén orientadas al este, ya que «sobre esta base se desarrollan los rezos y ritos de inhumación propios del Islam como, por ejemplo, acomodar el cuerpo a medio lado o introducir tierra en el ataud». «De este modo -se ha felicitado Zupiria- estos ayuntamientos están respondiendo a una realidad socio-religiosa y cultural crecientemente plural y también al respeto a las libertades y derechos fundamentales». Y es que, ha añadido, «la libertad de religión es uno de los derechos humanos reconocidos universalmente en todos los tratados y convenios internacionales de derechos humanos. Y esta libertad incluye tanto el derecho a profesar libremente cualquier religión, de manera individual o colectiva, así como el derecho a no profesar ninguna religión o creencia».
Antecedentes
Zupiria ha recordado que ya antes de la pandemia se puso de manifiesto la «problemática» que suscitaba el hecho de que en los cementerios vascos no hubiese opciones para realizar enterramientos por rito islámico. Una situación que se vio agravada a partir de marzo de 2020 al no poder los ciudadanos musulmanes repatriar los cuerpos de sus fallecidos a sus lugares de origen para inhumarlos conforme a su rito. A la ausencia de cementerios en Euskadi se sumó el cierre de algunos camposantos que sí cuentan con este tipo de parcelas en otras comunidades autónomas.
Esta cuestión fue presentada ante la comisión asesora ADOS para la colaboración con las comunidades islámicas de Euskadi, creada en abril de 2018 y que constituye el órgano de participación, cooperación y asesoramiento para las políticas públicas del Gobierno Vasco y de las instituciones vascas en sus relaciones con las comunidades islámicas y para favorecer la convivencia.
Esta comisión abordó de inmediato esta cuestión y estableció contacto con diferentes ayuntamientos para encontrar una alternativa que permitiese una solución de urgencia. El Ayuntamiento de Arrigorriaga (Bizkaia) ofreció un espacio que permitía esta intervención, disponiendo espacio para 16 sepulturas en los que era posible realizar este tipo de enterramiento, que estuvieron preparadas en septiembre de 2020. Desde entonces se han ocupado 10 nichos. A finales de 2021 también se habilitaron tumbas islámicas en Vitoria.
En mayo de 2021 la Comisión ADOS convocó a varios ayuntamientos de Gipuzkoa para tratar de encontrar una solución en este territorio a esta necesidad. Varios municipios han mostrado su disposición favorable y tras cuatro reuniones conjuntas, se han mantenido encuentros en cada uno de los municipios, de los que los cuatro citados tomarán la delantera. El objetivo del Gobierno Vasco es que a medio plazo, pueda existir un cementerio en cada comarca con espacio para la realización de enterramientos según el rito musulmán.
