En la actualidad, se están realizando varios esfuerzos en Japón para atraer a visitantes musulmanes. Así por ejemplo, la ciudad de Sano, en la prefectura de Tochigi, destaca por su número de mezquitas, carnicerías y restaurantes halal. De este modo, la ciudad se ha convertido en un punto de referencia para los musulmanes en Japón.
En su restaurante, el empresario malayo Mohammed Alif atiende a clientes y les ofrece menús halal, en especial de la comida malaya. Los clientes no son sólo turistas, sino también residentes. Desde 2005, 2.571 trabajadores extranjeros, que representan un 2% de la población de la ciudad, se han instalado en ella. La población de países islámicos como Indonesia y Bangladesh se está incrementando. De hecho, el Secretariado de la Asociación del Cricket de Japón se trasladó a la ciudad en 2009.
En Julio de 2017, fue completada la mezquita de la ciudad.
En marzo de este año, fue publicado en cinco idiomas (japonés, inglés, indonesia, malayo y urdu) un mapa que incluye los sitios islámicos de la ciudad, incluyendo mezquitas, restaurantes y tiendas halal además de los sitios propiamente turísticos.
Los esfuerzos dieron fruto y en septiembre de este año, 25 estudiantes universitarios de Malasia visitarán Sano. “Si los turistas y los inmigrantes vienen a esta ciudad, que tiene -como el resto de Japón- tasas de crecimiento demográfico muy bajas, esto le dará el impulso que necesita”, señala Alif.