Los teólogos musulmanes le dan al término “milagro” la siguiente definición: “Un milagro es cuando Dios Todopoderoso hace algo increíble que no se puede repetir. Y el Señor revela este acto a través de Su mensajero para convencer a la gente de su veracidad y la autenticidad de su misión profética.”
Un milagro puede ser de tres tipos:
- Una palabra, como un Sagrado Corán;
- Una acción, como un manantial de agua que surge entre los dedos del Profeta Muhammad (PB)
- Una inacción, como sucedió cuando el Profeta Ibrahim (Abraham) no se quemó.
Los profetas (que la paz y las bendiciones sean con todos ellos), como se mencionó anteriormente, realizaron milagros para convencer a las personas de su honestidad y de la naturaleza divina de sus Mensajes y sus Libros.
Un amplio círculo de personas conoce la vida de algunos de los profetas (la Paz sea con ellos) y los milagros que realizaron debido a los libros escritos e incluso las películas realizadas. Sin embargo, los milagros no solo se produjeron, sino que fueron realizados por todos los mensajeros de Dios, y, por supuesto, el mayor de todos los profetas y mensajeros es el Profeta Muhammad (PB), que también hizo milagros. Discutiremos brevemente algunos de ellos en este artículo.
El mayor milagro del Mensajero de Dios es el Sagrado Corán
El Sagrado Corán es el mayor de todos los milagros realizados no solo por el Profeta Muhammad (PB) sino también por todos los demás profetas desde la época de Adán (la paz y las bendiciones sean con ellos), ya que los milagros de estos últimos cesaron con su transición al otro mundo, mientras que El Corán es el mayor milagro y permanecerá hasta el fin de los tiempos.
Desde el momento de la revelación de los enemigos del Islam han tratado de crear algo similar o encontrar un error en el Corán, pero todos los intentos fueron en vano. Porque la creación de algo como él no está dentro de la capacidad humana, ni de la civilización de los genios, ni de sus esfuerzos conjuntos. El Señor en el Corán dice:
“Di: “Si los hombres y los genios se juntasen para traer un Corán como éste no podrían traerlo aunque se ayudasen unos a otros”.
(17:88)
La razón para enviar este versículo fue que aquellos que no creían en la misión profética del Profeta (PB) y no aceptaban las Escrituras comenzaron a afirmar que ellos, si quisieran, podían componer algo similar. Sin embargo, no importa cuánto lo intentaran y lo intenten hasta el día de hoy, no han tenido éxito y no lo lograrán. Dado que el Creador de todas las cosas nos ha desafiado está claro para cualquier persona sensata que no hay posibilidades de crear algo similar.
El Corán, a diferencia de todas las demás Escrituras, no ha desaparecido y no ha sufrido cambios ni distorsiones. Cada una de sus letras nos llegó en la forma en que fue revelada y escrita durante el tiempo del Mensajero de Dios (PB). No hay y nunca ha habido dudas porque:
- El propio Creador del Corán aseguró que mantendría Su Escritura (significado): “En verdad, Nosotros hacemos descender el Recuerdo3 y, en verdad, Nosotros somos sus protectores.”
- Algunas copias del Corán han sobrevivido hasta el presente desde la época del Califa Uzmán. Las copias antiguas del Corán se almacenan tanto en museos como en colecciones privadas no son pocas y es posible si alguien lo desea, compararlas con las copias modernas.
La razón del hecho de que el Sagrado Corán esté preservado de todos los cambios y distorsiones es que fue transmitido a la gente por el Último de los Profetas (PB) enviado a toda la humanidad, después del cual no habrá otros. Y si el Corán hubiera sufrido un cambio, toda la humanidad desde la época del Profeta (PB) hasta el Día del Juicio podría haberse extraviado. Las escrituras anteriores, como los mensajeros que las llevaron a la gente, fueron dirigidas a ciertas naciones y fueron diseñadas para un cierto período de tiempo hasta la llegada del próximo mensajero, que, de ser necesario, podría corregir la situación indicando el camino correcto.
¿Qué es el Corán?
El Corán, para un musulmán, es más que un libro sagrado; es la guía suprema y la palabra incuestionable de Alá, revelada al último de Sus profetas, el Profeta Muhammad. No es solo un conjunto de directrices éticas y morales, sino una recopilación de revelaciones divinas que iluminan el camino hacia la paz, la comprensión y la sabiduría en todos los aspectos de la vida.
El Corán no es solo un texto para ser leído, sino también para ser recitado y escuchado, con cada palabra y cada letra cargada de significado espiritual y estético. Es una fuente de consuelo en tiempos de dificultad, una fuente de gratitud en tiempos de alegría y una constante recordación de nuestro propósito en la vida.
El Corán es un regalo de Alá que sirve como una brújula espiritual, siempre señalando la dirección hacia la rectitud, la compasión y la justicia. Cada sura, cada aleya, cada palabra, se ve como un espejo que refleja el mensaje divino y guía a los creyentes en su viaje de fe.
Estructura y Composición del Corán
El Corán está compuesto por 114 capítulos o Suras de longitud variable, que van desde un solo verso hasta varios cientos. Cada Sura se compone de varios versos, conocidos como Ayat. Las Suras no están organizadas cronológicamente, sino más bien según su longitud, con las más largas generalmente al principio del libro y las más cortas hacia el final.
Sin embargo, cada Sura y Aya en el Corán tiene su lugar y propósito, presentando un equilibrio único de enseñanzas legales, éticas, históricas y espirituales que abarcan todos los aspectos de la vida humana.