Tumbado en el césped verde, justo cuando el sol se ponía en el horizonte, Mouez Hassen, el portero de las Águilas de Cartago y de la selección tunecina, habría fingido estar lesionado para permitir que sus compañeros de equipo pudieran romper el ayuno a la hora prevista.
Esta escena ocurrió dos veces con una sincronización perfecta, en los dos partidos de preparación de Túnez para el mundial contra Portugal y Turquía. Los internautas tunecinos, intrigados y divertidos al mismo tiempo, adquirieron una firme convicción: Mouez Hassen, a pesar de todo su talento como actor, se les apareció como un lesionado imaginario que estaba tendido en el momento de romper el ayuno de Ramadán con el fin de ofrecer un descanso estimulante a su equipo.
Cuando se tumbó en el césped, sus compañeros de equipo y él mismo comieron y bebieron antes de reanudar el encuentro frente a sus desconcertados rivales.
Aquellos que tenían dudas pudieron despejarlas leyendo un travieso tuit de Mouez Hassen, acompañado de emoticones que parecen sonreír ante su engaño: “Tenía un hermano malo”, escribió en la forma de un gran guiño cómplice dirigido a sus seguidores.