El fin sagrado de Ramadán es conmemorado en estos días por el mundo musulmán tradicionalmente en el entorno familiar.
En todo el mundo 1.500 millones de musulmanes celebran una de sus principales fiestas: el Eid al-Fitr, que marca el final del Ramadán, durante el que se guarda ayuno.
Algunos países musulmanes, como Arabia Saudí, Siria, Turquía, Qatar, Indonesia, Kazajistán, Malasia, entre otros, declararon, el viernes, el fin de Ramadán, que lo será también para los musulmanes que viven en Australia, Rusia y el Reino Unido. Sin embargo, en Irán y algunos países como Iraq, Nigeria, Omán o Pakistán, el Eid tuvo lugar el sábado.
El primer día de los festejos, los musulmanes realizan tradicionalmente una oración especial en las mezquitas y durante los tres días que dura la festividad, los niños visten ropa nueva y reciben regalos.
Coincidiendo con la festividad, Siria y Egipto liberaron a cientos de presos. El gobierno sirio decretó la libertad de más de 670 hombres y mujeres de distintas cárceles. El presidente, Bashar al Assad se dejó ver hoy de una mezquita en Hama, en el centro del país, donde acudió a rezar.
El viernes, también Egipto decretó la libertad de 502 presos, entre ellos 25 mujeres, entre ellos personas encarceladas por participar en protestas no autorizadas. El más famoso es quizá Hisham Talat Mustafa, condenado a 15 años de cárcel en 2008 por el asesinato de una cantante libanesa.