alsodux pueblo musulman

Una visita a Alsodux traslada a los visitantes a las tierras árabes, donde el campanario se transformaría, con poca dificultad, en minarete. Las primeras edificaciones de Alsodux anuncian la llegada a este pueblo nazarí de la Taha de Marchena. Una vez más, la iglesia se levanta donde antes se ubicó la mezquita, en un claro intento de cristianizar lugares de culto pagano. La capilla mayor aparece diferenciada y la cubierta es de limabordón. Al exterior, su bello color ocre se funde con el blanco de las casas y el verde lustroso de la huerta.Su nombre, de resonancia árabe, se ha traducido tradicionalmente como el «sexto», derivación del vocablo árabe al-sadis, el número seis, o de sodux, forma dialectal andalusí que significa un sexto.

Estos vocablos hacen referencia al lugar numérico que ocupaba el pueblo en la Taha de Marchena, aunque esta tesis es rechazada por arabistas actuales se constata que el nombre ha sufrido una transformación morfológica de Sodu, Zodux, El Soduz, Alsoduz, definiendo la forma actual de Alsodux. La primera referencia histórica del pueblo corresponde a Idrisi (geógrafo y cronista musulmán del siglo XII), el cual nombra la alquería como lugar estratégico para la vigilancia del río Nacimiento y su acceso a Guadix. Aún en época musulmana, a partir del 1232, cuando el reino de Al-Andalus queda reducido al sultanato nazarí, Alsodux se inscribe como uno de los diez lugares que forman la Taha de Marchena. Tras la rendición de Baza y las Capitulaciones de Almería, en 1489, Alsodux deja de ser musulmana, erigiéndose los símbolos del nuevo poder político y religioso.

La antigua taha es dada como recompensa a don Gutierre de Cárdenas y Chacón por los Reyes Católicos en reconocimiento por su ayuda prestada en la Reconquista. A pesar de formar parte del señorío de los Cárdenas durante el siglo XVI, Alsodux seguirá siendo morisco hasta la definitiva expulsión de éstos en 1570, después de la última rebelión, en que fueron casi exterminados de forma sangrienta y cruel, caracterizándose este siglo por la limpieza ideológica llevada a cabo tanto de judíos como de musulmanes en detrimento de la economía y la cultura. La gastronomía es otro de los grandes reclamos para visitar Alsodux. Sus platos de cuchara, como los potajes de trigo, acelgas o hinojos, se pueden combinar con otras propuestas tradicionales, caso de las migas o la fritada de conejo.

FuenteJ. L. Pascual – El Ideal
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