Tras casi nueve meses desde el comienzo
de la pandemia, con un número de contagiados que supera los 37
millones, el Covid-19 sigue sin poder ser controlado. A pesar del
duro esfuerzo de los diferentes países, el brote sigue
expandiéndose, y con ello también aumenta el temor a un nuevo
repunte en el número de contagios en el invierno.
Después de
casi 2 meses durante el cual el foco del virus se había trasladado a
Latinoamérica y se había conseguido frenar los contagios en Europa,
en las pasadas semanas el número de contagios ha aumentado sin cesar
en Europa. Las personas vuelven a mirar con preocupación este hecho
ante la posibilidad de un nuevo confinamiento total.
Durante
las últimas semanas se han tomado medidas en diferentes capitales
europeas como París, Berlín o Madrid. Y en las próximas semanas
habrá nuevas restricciones en Reino Unido, Polonia, Holanda y
Bélgica. Y a modo preventivo otros países están tomando medidas de
prevención.
En España, la capital se encuentra en un estado
de alarma que no permite que los habitantes puedan salir o entrar
dentro del municipio sino es por una causa justificada. Aparte de
ello otras ciudades se encuentran con restricciones de movilidad,
como Salamanca. También en España, preocupa la situación de
Cataluña, donde el número de casos no ha descendido en las últimas
semanas. A pesar de las medidas tomadas, no se ha conseguido bajar el
número de casos, y cada vez hay más porcentaje de ocupación de las
camas UCIS en los hospitales. Por otro lado, se ha comenzado la
campaña de vacunación contra la gripe para poder evitar un caos
durante el invierno.
A pesar de una inminente segunda ola en
Europa, la mayoría de la población intenta llevar una vida lo más
normal posible. Sobre todo, mantener una normalidad, para no agravar
una situación económica ya en decaimiento. Los gobiernos también
intentan a toda consta evitar un segundo confinamiento, que
resultaría sin duda un desastre para la economía. Pero lo
importante es controlar los contagios.
Ante los nuevos
rebrotes del Covid-19 en Europa, se están tomando medidas para que
el efecto en la sociedad y la economía sea la mínima posible. Y
esto sin dejar de prestar atención a las posibles vacunas que están
en desarrollo en diferentes países del mundo. Pero ante todo se pide
una responsabilidad individual para poder controlar los contagios.