“La liberación de mi padre ha sido aceptada. ¡Al hamdu lil lah!” Con estas palabras, Maryam Ramadan anunció el jueves 15 de noviembre por la noche, en Twitter, la puesta en libertad de su padre, el islamólogo suizo Tariq Ramadan.
Esta decisión se tomó después de una audiencia celebrada el mismo día ante el Tribunal de Apelaciones de París en presencia de Tariq Ramadan, quien ha reafirmado su inocencia ante las acusaciones de “violaciones” ante los jueces desde su encarcelamiento en febrero.
Varias solicitudes de liberación se han hecho en los últimos meses a la justicia, sin que ninguna hubiera tenido éxito. Esta vez, consiguió su objetivo después de 286 días de detención.
Sin embargo, Tariq Ramadan, cuyo estado de salud se ha deteriorado durante su detención, está sujeto al pago de una fianza de 300.000 euros, incluidos 200.000 para garantizar el pago de las multas y daños, según el abogado de una de las querellantes, Francis Szpiner. También deberá entregar su pasaporte suizo y le está prohibido abandonar el territorio francés y ponerse en contacto con las querellantes y ciertos testigos. Tendrá que acudir a la comisaría de policía una vez a la semana.