Pudo haber sido la mezquita más grande del Sudeste de Europa, pero las autoridades musulmanas rumanas decidieron lo contrario. El proyecto de la Gran Mezquita en Bucarest ha sido cancelado debido al alto costo de construir el edificio, según el Mufti rumano.
Todo había estado listo durante algunos años a nivel administrativo. En junio de 2015, el primer ministro rumano, Victor Ponta, firmó un acuerdo con el gobierno turco para la construcción de una gran mezquita en la capital rumana. El proyecto debería haberse lanzado en 2017 y, de acuerdo con el plan y el modelo publicado por la Diyanet Turkish Foundation en junio de 2017, la mezquita habría tenido una capacidad de 1.500 personas e incluido una biblioteca, una escuela coránica e infraestructuras lúdicas.
Teodor Baconschi, ex ministro de Asuntos Exteriores, calculó el costo total del proyecto en 3 millones de euros. “Los costos eran mucho más altos que el presupuesto actual de nuestra institución y de lo que la comunidad musulmana puede pagar”, dijo el mufti rumano, Iusuf Murat, para justificar la cancelación del proyecto. También presentó una solicitud ante el Ministerio de Cultura para devolver la propiedad asignada a la mezquita, que no será finalmente construida.
Cuando el proyecto de construcción se hizo público, aparecieron algunas protestas de activistas anti-Islam en Rumanía, en nombre de la preservación de la herencia ortodoxa del país. El mufti insistió, sin embargo, en que la cancelación no está relacionada de ninguna manera con los movimientos de protesta.