El martes 10 de julio, una comisión del Senado francés emitió su informe sobre el terrorismo titulado “Por una República justa pero más fuerte”. Contra la amenaza terrorista, los miembros de la comisión han decidido apuntar al salafismo en particular, argumentando que esta tendencia podría inscribirse “en la lista de sectas peligrosas” en Francia.
Después de su creación el 11 de enero de 2018, el Comité de Investigación del Senado abordó el tema de la “Organización y medios de los servicios del Estado para enfrentar la evolución de la amenaza terrorista después de la caída del Estado Islámico”. El informe fue publicado el martes 10 de julio, después de 32 audiencias realizadas, algunas a puerta cerrada, entre el 6 de marzo y el 12 de junio.
Si bien reconoce los esfuerzos y recursos movilizados por el Estado para combatir el terrorismo, la comisión, presidida por Bernard Cazeau (LREM) y que tiene como ponente a Sylvie Goy-Chavent (Unión Centrista), cree que “el tratamiento de la amenaza terrorista sufre de insuficiencias reales”.
Entre sus afirmaciones, el informe señala que “para superar los defectos del plan contra la radicalización presentado en febrero pasado, la comisión cree que es necesario “confiar en los musulmanes para promover un contradiscurso y la lucha contra el salafismo”. El informe también aboga por la participación activa de los alcaldes en el combate contra el terrorismo dándoseles acceso al Fichero de Tratamiento de los Signos para la Prevención de la Radicalización de Carácter Terrorista.
También aboga por la expulsión de “individuos radicalizados de nacionalidad extranjera” y por privar de la nacionalidad francesa a los individuos de doble nacionalidad que hayan cometido actos terroristas”. También se propone crear un agravante al delito de apología y de incitación a actos terroristas cuando las declaraciones incriminatorias se realicen durante el ejercicio del culto”.
Por último, el informe ataca al salafismo, al que presenta como “una ideología que alimenta la amenaza interior”. Según los servicios de inteligencia esta tendencia cuenta con unos 130 centros y entre 40.000 y 60.000 adeptos en Francia. El informe propone inscribir el salafismo en la lista de “sectas peligrosas de la Misión interministerial de vigilancia y lucha contra las sectas”.