El Grupo Parlamentario Socialista ha presentado una moción en la Asamblea para declarar al presidente de Vox, Santiago Abascal, persona ‘non grata’ en Melilla por sus «declaraciones racistas» contra los musulmanes, después de que el dirigente político pidiese “más muros y menos moros” este domingo en un mitin en Murcia.
Tal y como ha explicado la secretaria general de los socialistas melillenses, Sabrina Moh, el objetivo del PSOE es que los representantes en la Asamblea de toda la ciudadanía «condenen estas palabras que suponen un grave insulto no solo a la mitad de la población de Melilla sino a cualquier melillense que esté en contra de estas soflamas racistas”.
En palabras de la líder socialista, el discurso de Vox “plagado de prejuicios, bulos y mentiras” se viene dando desde hace años, pero “se ha ido exacerbando sin pudor en los últimos tiempos, convirtiendo a las personas que provienen de otros países, de otras etnias, que tienen otras culturas o profesan otras religiones, en enemigos a abatir y en los culpables de todos los males que, según ellos, azotan a nuestro país y a Europa”.
Su método, ha apostillado, es siempre el mismo: «la generación de un bulo deliberado, la presentación de una falsedad como real y acusar a un colectivo, con el único fin de generar odio». “El discurso de Vox es incendiario y peligroso porque atenta directamente contra la realidad europea, diversa e intercultural”, ha advertido Moh, que ha recordado que Melilla “es un valioso ejemplo de convivencia e interculturalidad”.
“Esta es una ciudad abierta en la que, a lo largo de los siglos, gentes de diversas de culturas y procedencias nos hemos ido asentando”, ha recalcado la líder socialista, que ha incidido en que actualmente “convivimos en armonía cristianos, musulmanes, judíos, hindúes, gitanos, chinos… construyendo día a día un proyecto común que se llama Melilla, basado en el conocimiento, el respeto, el consenso y el aprecio recíproco de las valiosísimas aportaciones que cada una de las comunidades suman a nuestro acervo común, logrando una ciudad y una cultura únicas, ejemplo para el resto del mundo.”
Insulto a los musulmanes
Llegados a este punto Sabrina Moh ha recalcado que las alusiones “racistas y gruesas de Santiago Abascal contra la comunidad musulmana española, incitando a la estigmatización de parte de la población por nuestra procedencia y por nuestras creencias y relacionando a las personas que profesamos el Islam con la delincuencia en general y, especialmente, con la seguridad de las mujeres, son absolutamente intolerables”.
“Unas calificaciones racistas e insultantes que son inaceptables en cualquier parte del mundo pero más aún si cabe en una ciudad como la nuestra, donde la mitad de la población somos musulmanes y donde, al igual que el resto de melillenses indistintamente de su origen cultural o fe, convivimos en paz y en el respeto mutuo”, ha dejado claro.
Por todo ello, Moh ha hecho un llamamiento a los diputados de todas las formaciones políticas de la Asamblea para condenen estas palabras y para que apoyen la propuesta de declarar persona ‘non grata’ a Santiago Abascal.
“Esto no tiene nada que ver con divergencias políticas o diferencias ideológicas, hablamos de una línea roja que no se puede cruzar porque atenta contra los valores más básicos y elementales de nuestra Constitución, de la democracia y de la propia convivencia, por lo que no entenderíamos que nadie se abstuviera de apoyar esta iniciativa”, ha razonado.
En palabras de la secretaria general del PSOE local, la extrema derecha ha normalizado “un lenguaje excluyente, difamatorio y violento que deshumaniza a los que ellos consideran “diferentes”, acusándolos de no compartir las esencias españolas, de las que solo ellos son garantes, y de difuminar la identidad europea en un alarde de intransigencia que no podemos permitir porque hace peligrar la convivencia”.
“Los demócratas nos tenemos que fortalecer y unir para expulsar estos mensajes de nuestros discursos políticos a fin de preservar los valores democráticos de España y de Europa, la igualdad de todos los y las ciudadanas, la libertad de credo o de ideología, la tolerancia y el respeto a la diversidad que garantizan nuestra convivencia, en definitiva el cumplimiento del mandato de nuestra Carta Magna”, ha concluido.