Cementerio municipal de Alicante contará con parcelas para enterramientos musulmanes

El cementerio municipal de Alicante contará por primera vez con espacios exclusivos para musulmanes y judíos. El Ayuntamiento ha aprovechado el proyecto de ampliación del camposanto para habilitar dos zonas exclusivas para otras confesiones. En concreto, habrá 175 tumbas en contacto con el terreno y con el rostro orientado hacia La Meca para fallecidos musulmanes. Actualmente, existen tumbas diseminadas por el cementerio de musulmanes y judíos, junto a las mayoritarias de cristianos.

El proyecto de ampliación, que urge por la falta de espacios libres para enterramientos, tiene un presupuesto máximo de 5,2 millones de euros y un plazo de ejecución de un año, por lo que se espera que esté listo para principios de 2025. Las empresas interesadas en ejecutar las obras en la infraestructura municipal tienen hasta el 13 de noviembre para presentar sus ofertas a la licitación del contrato.

El espacio exclusivo, con las tumbas con orientación específica, empezó a ver la luz en 2017, con la aprobación provisional de la Operación Integrada O/I 1, vinculada a la ampliación del cementerio histórico de 1918. Ese plan, pendiente de su visto bueno definitivo, pretendía duplicar la extensión actual del cementerio, al contemplar su ampliación sobre una superficie total de más de 350.000 metros cuadrados, lo que cubrirá -cuando se ejecute- las necesidades de la ciudad durante setenta años. “La nueva versión del plan define dentro de la idea global de parque-cementerio recintos específicos para los ritos islámico y judío y para un parque de cenizas en el sector sureste de la ampliación junto a un cementerio de mascotas en el sector norte, cuatro recintos que se encuadran dentro de la primera fase de ampliación del cementerio. Ya en la segunda fase de ampliación, en el extremo suroeste del ámbito del plan, se sitúa un tanatorio-crematorio en la zona más alejada de los núcleos urbanos del entorno”, explicaron desde el gobierno en 2017, durante la etapa del tripartito.

Las obras ahora licitadas por el gobierno liderado por Luis Barcala, según figura en la documentación oficial, se ajustan al vigente PGOU, con la calificacion del suelo de urbanos-cementerios. Sin embargo, la Operación Integrada se «encuentra pendiente de aprobación definitiva», según el pliego de condiciones, donde se defiende el proyecto de ampliación impulsado ahora por el ejecutivo, que se desarrollará sobre un ámbito de actuación de 16.549,34 metros cuadrados de superficie, con dos accesos desde el camino de Alcoraya, uno peatonal y rodado, y otro acceso al oeste lindando con la parte más antigua del cementerio. «El cementerio municipal de Alicante necesita una ampliación de manera urgente, ya que existen pocos nichos vacíos, además de que surge cada vez más la necesidad de tener tumbas para las personas de otras religiones que habitan en la ciudad, en concreto árabes [sic] y judíos. Se requiere una intervención que permita la ampliación del número de nichos disponibles, así como la ejecución de su entorno inmediato en cuanto a pavimentos y zonas ajardinadas», añade el documento del Ayuntamiento.

El espacio que ocupa el proyecto se encuentra en una zona de ampliación situada en la parte este del cementerio, que cuenta ya con algunos nichos, zonas ajardinadas y pavimentadas, siendo la superficie del ámbito aquellos espacios sin urbanizar que se encuentran colindantes a estas zonas ya urbanizadas.

La idea que se ejecutará consiste en aumentar el número de nichos disponibles mediante la ejecución de un total de 2.268 nichos para cristianos, dispuestos en cuatro alturas, con 175 lápidas musulmanas mediante tumbas en contacto con el terreno con el rostro orientado a La Meca y 107 judías, situándose dichas lápidas en la zona sureste del ámbito de actuación.

Se pretende, según el documento oficial, “continuar con el diseño y estética de los pavimentos y edificios ya ejecutados en dicha zona de ampliación, creando una continuidad en el espacio y asegurando una buena distribución, así como la adecuación de las redes de servicios necesarias que garanticen el buen funcionamiento de las instalaciones”.

Fuenteinformacion.es
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