El ayuntamiento de Lleida ha autorizado a la Comunidad Islámica de Cooperación y Unión derribar el edificio situado en el número 23 de la calle del Nord, lugar en el que está previsto que se edifique una mezquita que tendrá una capacidad para un centenar de personas.
Así lo aseguraron tanto fuentes de la comunidad musulmana como del propio ayuntamiento, que detallaron que las obras de derribo deberán llevarse a cabo en los próximos dos meses. El edificio es un almacén abandonado en mal estado cuya planta baja tiene una superficie de 352 metros cuadrados.
Tiene restos de amianto, por lo que el ayuntamiento ha recordado a la comunidad musulmana que este tóxico material deberá ser retirado y tratado debidamente para evitar riesgos para la salud.
La autorización del ayuntamiento a derribar este almacén es el primer paso para que la nueva mezquita sea una realidad, pero todavía falta el permiso de obras para su construcción, además de autorizar que el equipamiento se destine a centro de culto.
Precisamente, el ayuntamiento está trabajando para modificar la ordenanza municipal que regula estos equipamientos para permitir estos oratorios. Cabe recordar que esta sería la primera de una serie de pequeñas mezquitas que la comunidad musulmana de la ciudad quiere construir en diferentes barrios para dar respuesta al déficit de oratorios musulmanes en Lleida, ya que actualmente rezan en el Palau de Vidre de los Camps Elisis.
En el caso del oratorio previsto en la calle del Nord, su construcción corre a cargo del arquitecto Jesús Rafart, que en abril detalló a este periódico que esa mezquita tendrá capacidad para 100 personas, tendrá un minarete, una fuente y un patio de acceso y también servirá como un centro cultural “abierto a todo el barrio”.
Su coste es de unos 800.000 euros que pagará la comunidad musulmana y estará listo en un año.