El Gobierno de Vivas afronta la difícil misión de contentar a la comunidad musulmana sin contravenir la legislación vigente en materia de Sanidad Animal.
La festividad del Eid El Kebir, conocida como la Fiesta del Sacrificio, es una de las más importantes del calendario musulmán y conmemora el pasaje en que Abraham (Ibrahim) va a sacrificar a su hijo Isaac (Ismael) ante Dios hasta que Éste interviene proporcionándole un cordero que sacrificar en su lugar. En esta fiesta, cada núcleo familiar sacrifica un cordero para cumplir con los preceptos de la religión musulmana.
Hasta hace unos años en la ciudad de Ceuta se instalaban hasta 23 carpas por las diferentes barriadas para que se pudiese realizar este sacrificio por parte de las miles de familias musulmanas ceutíes.
Los problemas surgieron cuando los servicios técnicos sanitarios y veterinarios de la ciudad realizaron informes desfavorables sobre la legalidad de estas carpas y del sacrificio de animales fuera de las instalaciones oficiales, como es el matadero municipal, que es donde apuntan que deberían hacerse estos sacrificios.
Así, tanto la entrada de ganado en la ciudad los días previos a la fiesta, el alojamiento de estas reses y las condiciones higiénico-sanitarias de las carpas instaladas y del acto en sí del sacrificio por particulares contravienen la legislación vigente, tanto en Sanidad como en Sanidad Animal, por lo que el sacrificio en carpas fue prohibido.
Ahora, tras la celebración incluso de dos Plenos de la Asamblea para tratar este tema, donde se acordó estudiar la fórmula legal que permita esta Fiesta sagrada de los musulmanes, quedan apenas dos meses y el Gobierno no sabe cómo aprobar esta fiesta.
Capacidad ganadera de los pueblos
Uno de los mayores escollos que existen es delimitar la cantidad de animales que pueden ser introducidos en nuestra ciudad desde la península, ya que la frontera marroquí sigue cerrada por el momento. Esta «capacidad ganadera de los pueblos» viene delimitada por las características propias de cada ciudad y por la capacidad para albergar a estos animales y la de sus mataderos oficiales.Ç
Este número lo dan los veterinarios y los técnicos conforme a la normativa vigente y no se puede superar el límite establecido.
Por otro lado, la legislación prohíbe el sacrificio de animales fuera de las instalaciones habilitadas.
Acuerdo del Consejo de Gobierno de Melilla
En la Ciudad Autónoma de Melilla el Consejo de Gobierno aprobó en 2019 aprobar , de forma excepcional, «la salida de los animales ovinos y caprinos, destinados a ser sacrificados con ocasión de la celebración del Aid El – Kebir, de las explotaciones ganaderas autorizadas por la ciudad con destino a estos Centros Temporales de Sacrificio habilitadas al efecto, que contarán con el debido control y asesoramiento veterinario y demás medios que prevé la normativa de aplicación, al objeto de permitir la celebración del rito en cuestión».
Y aquí es donde el Gobierno de Juan Vivas se quiere «agarrar», pero el problema es que esos Centros Temporales de Sacrificio (las carpas) que se instalaban otro años no cuentan con la autorización ni el visto bueno de ningún veterinario ni técnico de la ciudad.
También está presente el problema de las asociaciones animalistas, que ya han advertido desde hace tiempo que van a exigir que se cumpla con la legalidad y no se permita el Sacrificio en carpas, siendo el matadero municipal el único lugar habilitado para ello.
El tiempo apremia y la solución se antoja difícil y lejos de llegar a buen término.