Millones de indonesios se desplazan en estos días a sus pueblos para celebrar junto a las familias el fin del ayuno del mes del Ramadán, periodo sagrado para los practicantes de la religión islámica.
Según la prensa local, alrededor de 15 millones de personas salen de Yakarta este fin de semana en un éxodo anual conocido localmente como ‘mudik’, mientras las calles de esta ciudad, habitualmente obstruidas por el tráfico, se encuentran prácticamente vacías.
Por su parte, las carreteras hacia otras provincias sí están llenas de autos con viajeros dispuestos a enfrentar recorridos prolongados, a veces pueden durar hasta 24 horas.
Ante esa situación, las autoridades advierten sobre la necesidad de respetar las leyes del tránsito en aras de evitar accidentes, pues en los últimos años decenas de indonesios han muerto durante el éxodo del Ramadán.
Además, aeropuertos, estaciones de tren y puertos se encuentran llenos de personas interesadas en llegar a diferentes destinos en este archipiélago de 17 mil islas.
En Indonesia habita la mayor cantidad de musulmanes del mundo, con 200 millones de personas que profesan la religión de Mahoma, por lo que esta celebración llamada Eid al-Fitr, tiene un gran impacto social.