En el mundo musulmán se trata del mes más importante del calendario islámico, el ramadan es un periodo de reflexión y devoción que coincide con la época del calendario lunar en el que el profeta Muhammad (PB) recibió sus primeras revelaciones.
De acuerdo a la definición que le hace el exalcalde de Maicao, Mohamad Dasuki, se trata de un periodo de mucha reflexión en el que las pasiones del hombre deben ser echadas a un lado y empezar a fortalecer la espiritualidad.
“Esta es la época del perdón y también el momento de la reflexión donde el musulmán sabe perfectamente que se debe dedicar casi por completo las 24 horas del día a alabar a Dios”, indica el exmandatario refiriéndose al dios que los protege de todos los males. Ellos también aceptan la existencia del profeta Mahoma a quien le dan el crédito de haber entregado los primeros libros del Corán por revelación de Dios.
El exalcalde sostiene que son 14 horas las que deben emplear en la meditación y reflexión y el musulmán no debe estar pendiente de las mujeres que no son de él y el ayuno es una lección que además de purificar el cuerpo, le enseña a entender el sufrimiento de los demás seres humanos que no están en capacidad de ingerir alimentos en el día o de quienes comen muy pocos alimentos por cualquier circunstancia en algún rincón del mundo.
En Maicao se encuentra la tercera mezquita más importante de Latinoamérica por su arquitectura y por la cantidad de musulmanes que la tienen como su centro de oración. Los maicaeros que profesan esa religión ha sido un mínimo número y probablemente sea esto por la disciplina que se debe llevar en las oraciones. Según Dasuki son cinco jornadas de oración en las que debe participar cada musulmán y la primera de ellas es cuando despierta el alba y se reflejan las primeras luces del día. Y de allí van las jornadas de plegaria en completo estado de ayuno.