Ramadán en Nicaragua

Marvin Juárez, hace un año se convirtió al Islam luego de practicar el cristianismo. Ahora se prepara para vivir su primera experiencia celebrando el mes del Ramadán, en el que, a través del ayuno y la oración, busca el perdón de sus pecados.

“Es un mes en el que somos más caritativos, porque creemos en que la recompensa es mayor en este mes, así como también los pecados el castigo es mayor, si no cumplimos a cabalidad, procuramos estar en paz, ayudar al necesitado y seguir las enseñanzas del Islam”, señaló.

Pero Marvin originario de Managua a la fecha, reconoce que su familia no aprueba del todo este cambio de religión que decidió realizar, porque desde pequeño su padre le educó en el cristianismo evangélico.

“Encontré ciertas cosas en mi biblia que para mi gusto no encajaban, me salí de la religión cristiana y siempre sentí esa necesidad de buscar de un Dios, porque siempre fui creyente de que hay un solo Dios, pero sentía que la doctrina que estaba no era la correcta, hasta que leí el Corán (la Biblia para los musulmanes), encontré en la que me sentía más cómodo”, añadió.

Este año el Ramadán inicia este miércoles 22 de marzo y por ello en la Mezquita ubicada en Managua, desde ya cientos de musulmanes árabes y nicaragüenses acuden para adorar a Allah a quien consideran Dios, mientras que a Jesús le llaman el profeta más cercano a él y no precisamente Hijo de Dios, como en el cristianismo.

Hussein Mohamed Eldahshan, director de la Mezquita, explicó que durante el Ramadán se ayuna desde que amanece hasta el anochecer y es en conmemoración de la primera revelación del profeta Muhammad Mahoma, creador de esta religión.

“El primer paso es no beber, no comer, no fumar, también no pueden tener relaciones sexuales con su esposa durante el ayuno en el día, sí se puede en la noche, pero además alejarse de todos los pecados que se cometen”, dijo.

Los exentos de realizarlo

Según Eldahshan, hay personas que están exentas de vivir el ramadán, tal es el caso de adultos que sean enfermos crónicos.

“También mujeres que están embarazadas, están menstruando o amamantado a bebés, están exentos, lo pueden hacer después”, manifestó.

Los cinco rezos diarios

A eso de las 12:30 del mediodía hombres ingresan por la derecha a la Mezquita, mientras las mujeres lo hacen por la izquierda.

Según les dicta su religión, los musulmanes rezan cinco veces al día, no importa el lugar donde estén deben hacerlo con la mirada con dirección hacia la Meca el lugar más sagrado de su fe, ubicada en Arabia Saudita. El primer rezo es a las 4 y 30 de la madrugada.

Eldahshan, puntualizó que rezar separados, es por una cuestión de respeto y no generar ninguna distracción entre ambos géneros, pero no se trata de ser excluyentes.

La purificación antes de ingresar en la mezquita

Marvin Juárez al igual que todos los varones, lo primero que hace es quitarse los zapatos, ingresar al baño a realizar la ablución, para posteriormente ingresar al templo principal.

“Básicamente consiste en lavarnos parte del cuerpo tres veces cada una, siempre empezando por la parte derecha del cuerpo, en este caso las manos, boca, nariz, rostro, todo el rostro hasta la barba incluso, luego los codos, el cabello y la oreja, para posteriormente hacerlo en los pies”, expresó.

El acto de orinar, defecar, la flatulencia, el adormecimiento, de modo que la conciencia se encuentra dormida en el estado del sueño, son actos que invalidan la ablución, por eso casi siempre deben realizarla antes de cualquiera de los cinco rezos.

El papel de la mujer en la Mezquita de Managua

Abu Baker Abdullah, líder administrativo de la mezquita, explicó que no se permite grabar el sitio de adoración donde están las mujeres, quienes rezan separadas de los hombres.

Ingresan con su Jilbab, hiyab o en raros casos burka. Las damas no son dadas a hablar ante las cámaras y se apresuran al tratar de ser abordadas, a pesar que Abdullah, aclaró fuera de la mezquita y en público se les puede realizar cualquier entrevista.

El Islam constituye, junto con el cristianismo y el judaísmo, una de las grandes religiones monoteistas del mundo. Se calcula que en la actualidad profesan el Islam unos 1.200 millones de personas repartidas por los cinco continentes.

En Nicaragua, según el Centro de Investigaciones Pew, hay al menos unos 1,000 musulmanes descendientes de Palestina, India, Bangladesh, Libia, Jordania, Pakistán; gran cantidad de ellos son nicaragüenses que se han convertido al Islam.

Fuentevostv.com.n
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